martes, 14 de octubre de 2008

El Salmón en el Auditorio Nacional y se mueve...


Dos rosas, una laringitis y el mejor concierto que he visto en los últimos diez años fue lo que me dejó Andrés Calamaro, el rey Salmón que tomó por asalto la noche rockera de la ciudad de México.
La cita: 13 de octubre, 20:30 hrs. Ante los ojos de la multitud… apareció en Salmón… 10 000 asistentes… y Andrelo reventó al 100% el aforo del Auditorio nacional. Afuera la reventa vendía las entradas de 110 dólares hasta en 400, nada mal para su primer concierto en esta ciudad que lo esperó por veinte años.
Algunos dirán que los presentes eran mayoritariamente argentinos, si esto fuera verdad… la que suscribe sería de alguna provincia de Buenos Aires, pero la verdad es que fue una fiesta de mexicanos que igual cantamos con el Master al ritmo de un reggae de Marley o un tango bien profundo.
El repertorio fue tremendo, Andrelo se veía algo nervioso al salir al escenario, pero al término de la primer canción, se convirtió en el líder de la tribu chilanga que coreaba: ¡Oe, oe, oe… Andrés… Andrés!
Dos banderas al fondo: México y Argentina, juntos unidos en la fiesta del mejor rock sudamericano, el Salmón nos dio motivos para cantar, gritar, extrañar y por qué no… hasta llorar.
No puedo hablar de momentos memorables porque todo el concierto fue entrañable, y único. Entonamos: Estadio Azteca, Te quiero, Los chicos, Flaca, Lengua popular y tantas más… Hasta Elvis y Marley fueron invocados con María… Y el Salmón se movía por todo el escenario.
Enfundado en camiseta con la imagen de mi general Emiliano Zapata dio cuenta a la mexicanidad presente de uno de nuestros verdaderos luchadores sociales, siempre respetuoso de lo nuestro recibió incontables muestras de afecto: flores, camisetas, besos, aplausos y su nombre no paraba de corearse.
Gracias por todo y mil conciertos que nos debe, mil que queremos para hacer estos encuentros de ñeris.
Termino esta primer entrega preguntando: ¿Cuándo vuelve el Salmón?



1 comentario:

chattran dijo...

es un gran musico es d elos que uno quiere volver a ver es de esos que se escuchan a cualquier hora es para dormir para cenar para tener sexito para darle un abrazo al vaso para desenfundar un perdon para permitirme fumar un pucho para reir y para orar digmos en el baño mi templo algo solido besos y vasos se la quier emucho buen escrito siempre lindo adios